Publicación que inició el camino de las revistas especializadas en folclore catalán y que está considerada como referente de la investigación catalana en este campo. Con el subtítulo “recodilles a Catalunya, València, Mallorca, Roselló, Sardenya, Andorra i terres aragoneses de parla catalana”, está escrita totalmente en este idioma. Su inspirador y director es el prestigioso folclorista Valeri Serra i Boldú (1874 -1938), colaborador del movimiento catalanista desde sus convicciones católicas y su espíritu conservador, y como tal se orientó a ensamblar la tradición popular y la motivación religiosa, tal como recoge el Diccionario histórico de la antropología española. Con una llamada de su fundador a “salvar las tradiciones”, la labor de la revista será recoger, principalmente, la tradición oral y trasvasarla a material escrito y así preservarla -de ahí el título Arxiu -, así como ofrecer estudios de reconstrucción histórica y comparada, monografías etnográficas y elaborar un corpus teórico sobre la materia. Se estructura en las secciones de Demofilología (literatura oral), Etología (costumbres), Pistología (creencias y supersticiones) y Noticias (de cursos, conferencias, exposiciones, concursos o bibliografía). Publicará también algunos artículos sobre folclore aranés, castellano, gallego o portugués. Sus textos están profusamente ilustrados con reproducciones de goigs = gozos (composiciones poéticas populares cantadas a la virgen en romerías o procesiones), aucas = aleluyas (estampas acompañadas de versos), ventalls, bojes, pliegos de cordel, estampas, grabados, dibujos o viñetas, y algunas páginas, de papel de mejor calidad, están dedicadas íntegramente a fotograbados (reproducciones artísticas, etc.). Los fascículos de la publicación son de 64 páginas, compuestas a dos columnas, acompañados de una cubierta ilustrada, estampada a varias tintas, y varias páginas con inserciones publicitarias, por lo que la entrega puede alcanzar en algún momento las 72 páginas. Su aparición fue irregular, el primero es de mayo de 1928; el segundo corresponde a este mismo año; el tercero, el cuarto y el quinto, a 1929, y el sexto, al año 1932. Todos ellos tienen paginación continuada, formando un primer volumen. El fascículo siete corresponde a mayo de 1935 e inicia numeración. El proyecto de Serra era componer un segundo volumen con otros seis fascículos, pero sólo debió dar a la imprenta hasta el número ocho. Fue una publicación dirigida a suscriptores y en su plan también incluyó la impresión de 125 ejemplares numerados e identificados con el nombre de cada suscriptor cooperador, acompañados de láminas. Fueron estampados en la Imprenta de la Casa de Caritat y la correspondencia administrativa estuvo en el domicilio de Editorial Orbis. El fascículo seis contiene índices de materias y sumarios del primer volumen. En sus páginas colaboran los principales folcloristas catalanes de la época. Aparecen las firmas, además de la de su director, de Rossend Serra i Pagès, Sebastià Fornés, Joan Amades, Josep Navarro i Cabanes o moseèn Antoni Navarro, entre otras muchas. Las de literatos, como moseèn Jacint Verdaguer (al que Serra reivindicó), Apel.les Mestres o Víctor Català; las de lingüistas, como Antoni Griera y Antoni Maria Alcover, así como de otros eruditos y aficionados. Destaca también entre sus colaboraciones las firmas de hasta treinta y dos autoras, entre las que se encuentran Sara Llorenç de Serra, Josefa Solsona de Bertrans, Angela Maleras, Carmen Dore, Antònia Solà i Ibós, Mercè Teixidó, Carmen Miralles o sor Eulàlia Anzizu, de cuya labor en la revista ha dado cuenta una investigación de Carme Oriol Carazo.