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Actividad B. El tratado perdido de Vitruvio

Imagina que se descubre una nueva copia del tratado de Vitruvio, escrita en Hispania por un aprendiz de ingeniero. En ella, describe cómo se construyó un acueducto en una ciudad romana, qué problemas encontró y cómo resolvieron el suministro de agua. En esta actividad, escribirás ese “capítulo perdido”, inspirándote en los documentos históricos y visuales disponibles.

Dinámica de la actividad

1. Presentación del personaje de Vitruvio:

Puedes consultar su tratado De Architectura (Libro VIII). Este texto te puede servir de punto de partida:

Marco Vitruvio Polión fue un arquitecto e ingeniero romano que vivió en el siglo I a. C., durante el periodo final de la República y el comienzo del Imperio, en tiempos de Julio César y Augusto. Aunque no fue un constructor de grandes obras conocidas, su prestigio se debe a que escribió el único tratado completo de arquitectura que ha llegado hasta nuestros días desde la Antigüedad: el De Architectura, compuesto por diez libros.

Este tratado no solo trata de la construcción de edificios, sino que ofrece una visión integral de los saberes técnicos romanos, incluyendo arquitectura, urbanismo, materiales, maquinaria, medición del tiempo, acústica y, de manera muy destacada, ingeniería hidráulica.

El Libro VIII está dedicado enteramente al estudio del agua. En él, Vitruvio explica cómo identificar las mejores fuentes, cómo probar la calidad del agua, y cómo construir sistemas para su captación, conducción y almacenamiento. Describe además distintos tipos de infraestructuras hidráulicas como pozos, cisternas, acueductos, cañerías, depósitos y máquinas para elevar agua, incluyendo norias, tornillos de Arquímedes y ruedas hidráulicas. También advierte sobre posibles problemas técnicos o geológicos, y recomienda materiales y técnicas específicas para evitar fugas o roturas.

A continuación, lee el siguiente texto adaptado inspirado en De Architectura de Vitruvio:

Capítulo séptimo,  de cuántas maneras se guía el agua:

De tres maneras se guía el agua, por arroyos, por canales fabricadas, por cañones de plomo, o arcaduces, de esta manera. Si con canales,la muralla por- do el agua fuere sea firme, y el suelo del arroyo tenga las medidas levantadas, y no menos en cien pies de medio  pie, y aquellas murallas sean como boueda, porque el sol no toque al agua.”


2. Redacción del relato histórico:

Imagina que se ha perdido parte del tratado y tú debes “reconstruirlo”. Escribe un breve párrafo añadiendo una recomendación de tu propia invención sobre cómo deberían usarse o cuidarse las aguas en una ciudad romana. Después ponlo en común con el resto de componentes de tu grupo y decidir cuál será el texto final.
Deberá incluir:

  • Una ciudad romana ficticia o real.
  • Una descripción del acueducto.
  • Un conflicto o problema a resolver (técnico, político, climático…).
  • Una solución coherente con el conocimiento romano.

Por ejemplo, esto podría ser un posible comienzo: “En la ciudad de Augusta Emerita, el agua se perdía en los sifones. Para resolverlo, recomendé reforzar los conductos con piedra en vez de plomo, pues resistiría mejor las lluvias...”

3. Ilustración o elemento gráfico:

El relato se puede acompañar de un dibujo del acueducto, un croquis o una "página escaneada" del supuesto tratado.

4. Presentación final:

Leed vuestro relato en voz alta mientras proyectáis la ilustración o elemento gráfico creado. 

Para terminar, sigue las indicaciones de tu profesor o profesora para realizar una evaluación con la rúbrica que encontrarás más adelante o la que te proporcione.

Valoración de la actividad

Tu trabajo en esta actividad se valorará con una rúbrica común para las dos propuestas principales de este bloque. En ella se tienen en cuenta aspectos como:

  • tu comprensión histórica,
  • el uso de fuentes,
  • la creatividad,
  • la expresión (oral, escrita o gráfica),
  • y la forma en que presentas tu trabajo.

Además, cada actividad tiene criterios específicos:

  • En la Actividad B (“El tratado perdido de Vitruvio”) se tendrá en cuenta la ambientación histórica, la coherencia del relato, la calidad de la expresión escrita y la relación entre texto e imagen.

Sigue siempre las indicaciones de tu profesor o profesora para aplicar esta rúbrica (o la adaptación que te proporcione) y completa la autoevaluación o coevaluación cuando se te pida.

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